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miércoles, 20 de enero de 2016

EL JOVENCITO FRANKENSTEIN

FECHA DE ESTRENO
15 de Diciembre de 1974
TÍTULO ORIGINAL
Young Frankenstein
DIRECCIÓN
Mel Brooks
PRODUCCIÓN
Michael Gruskoff
GUION
Gene Wilder, Mel Brooks
REPARTO
Gene Wilder (Doctor Frederick Frankenstein), Marty Feldman (Igor), Peter Boyle (El Monstruo), Teri Garr (Inga), Cloris Leachman (Frau Blücher), Madeline Kahn (Elizabeth), Kenneth Mars (Inspector Kemp), Richard Haydn (Herr Falkstein), Liam Dunn (Señor Hilltop), Rolfe Sedan (Conductor de tren), Danny Goldman (Estudiante de medicina), Leon Askin (Herr Walman), Gene Hackman (Harold, el hombre ciego), Oscar Beregi Junior (Carcelero sádico), Arthur Malet (Anciano del pueblo), Anne Beesley (Niña), Richard Roth (Ayudante del Inspector)
CINEMATOGRAFÍA
Gerald Hirschfeld
BANDA SONORA
John Morris
DISTRIBUCIÓN
20th Century Fox
DURACIÓN
105 minutos

FREDERICK FRANKENSTEIN: “Que trabajo tan asqueroso.”
IGOR: “Podría ser peor.”
FREDERICK FRANKENSTEIN: “¿Cómo?”
IGOR: “Podría llover.”

FREDERICK FRANKENSTEIN: “Veamos. ¿Ese cerebro que me trajo era el de Hans Delbruck?”
IGOR: “No.”
FREDERICK FRANKENSTEIN: “Ah, bueno. ¿Le importaría decirme de quién era el cerebro que yo puse ahí?”
IGOR: “¿No se enfadará usted?”
FREDERICK FRANKENSTEIN: “Palabra que no me enfadaré.”
IGOR: “De A… no sé qué.”
FREDERICK FRANKENSTEIN: “¿A… no sé qué? ¿A… qué?”
IGOR: “A… Normal.”
FREDERICK FRANKENSTEIN: “A… Normal.”
IGOR: “Estoy seguro de que ese era el nombre.”
FREDERICK FRANKENSTEIN: “¿Está diciendo que le he puesto un cerebro anormal a un gorila de dos metros cuarenta de alto, y un metro treinta de ancho?”

CURIOSIDADES
Tras varios fracasos en taquilla, incluyendo clásicos de culto como “Los Productores” (1967) y “Un Mundo de Fantasía” (1971), Gene Wilder por fin pudo disfrutar de un éxito de taquilla con su papel en la película de Woody Allen “Todo lo que Usted Siempre Quiso Saber Sobre el Sexo, pero Nunca Se Atrevió a Preguntar” (1972). Fue durante aquel tiempo cuando Wilder comenzó a jugar con la idea de realizar una historia original sobre el como el nieto de Victor Frankenstein heredaba la mansión y el trabajo de su abuelo. Wilder ya había realizado varios intentos como guionista temprano en su carrera, escribiendo varios guiones sin finalizar que consideraba bastante deficientes. Mientras escribía su nueva idea, su agente Mike Medavoy le sugirió que realizara una película con sus dos nuevos clientes, el actor Peter Boyle y el comediante Marty Feldman. 
Wilder mencionó su idea de Frankenstein, y en pocos días le envió a Medavoy cuatro páginas sobre su idea. Las páginas cubrían la escena de estación de tren en Transilvania, la cual había escrito tras ver a Feldman en un espectáculo.
Medavoy le sugirió a Wilder que hablara con Mel Brooks para que dirigiera el proyecto; aunque Wilder ya había hablado con Brooks acerca de su idea previamente. Tras escribir otro escenario de dos páginas había llamado a Brooks, quien le expresó que parecía una idea simpática aunque mostrando poco interés. Aunque Wilder creía que Brooks se negaría a dirigir una película que no había concebido personalmente, volvió a dirigirse a Brooks unos meses más tardes, cuando ambos estaban embarcados en el proyecto “Sillas de Montar Calientes” (1974). Mientras ambos tomaban un café, Brooks expresó su preocupación considerando que no se necesitaba otra película sobre Frankenstein. Sin embargo, cuando Wilder expresó su idea de que el nieto del científico no quisiera saber nada de su familia, Brooks cambió de idea al considerar que esa idea sí era divertida.
Al contrario de sus previas y posteriores películas, Brooks no apareció en “El Jovencito Frankenstein”, aunque grabó varias voces para distintos papeles e interpretó a un alemán del pueblo en una escena corta. Mel Brooks explicó que no se le permitió aparecer en la película, y que de hecho era el trato que había realizado con el propio Gene Wilder. La razón era que Brooks tendía romper la barrera entre la realidad y la película, incluso de forma involuntaria, como guiño al espectador. Tras sellar dicho trato, ambos procedieron a colaborar para concluir el guion. Mel Brooks deseaba dos millones trecientos mil dólares para el presupuesto; pero Columbia Pictures decidió que un millón setecientos mil eran más que suficientes. Esto provocó que Brooks decidiera acudir a 20th Century Fox para la distribución, una vez el estudio accedió a proporcionarle un presupuesto mayor. Más adelante, Fox firmaría un contrato de cinco años con Wilder y Brooks para el estudio.
Durante el rodaje, el reparto tuvo la libertar de improvisar varias bromas para la película. 
Cloris Leachman improvisó la escena en la cual su personaje, Frau Blücher, ofrecía leche caliente al Doctor Frankenstein, mientras que Marty Feldman secretamente cambiaba de lugar la joroba de su personaje Igor, hasta que alguien se dio cuenta y el chiste fue añadido a la película. De hecho su personaje siempre preguntaba de qué joroba estaban hablando. En una de las escenas de una reunión del pueblo, una de las figuras de autoridad afirmaba que ya sabían a que se estaba dedicando el Doctor Frankenstein basándose en experiencias previas. Brooks explicó que esto era una referencia a las primeras cinco películas del personaje, producidas por Universal Films. Por su parte, Gene Wilder reafirmó que la película tomaba varias ideas de “El Doctor Frankenstein” (1931), “La Novia de Frankenstein” (1935), “El Hijo de Frankenstein” (1939), y “El Fantasma de Frankenstein” (1942). La película fue nominada al Oscar al Mejor Sonido y Mejor Guion Adaptado, perdiendo ambas estatuillas contra “Terremoto” y “El Padrino: Parte II” respectivamente. 
Brooks adaptó la película en un músical del mismo título que se estrenó en Seattle en agosto de 2007.

NOTA PERSONAL
Debo reconocer que siempre he considerado que Mel Brooks, o bien dirige comedias excepcionales o verdaderos desastres que no me han gustado nada. Sin embargo, este no es el caso, ya que “El Jovencito Frankenstein” es una de mis comedias favoritas con diferencia. De hecho es mi favorita de todas las dirigidas por Mel Brooks, aunque con “La Última Locura de Mel Brooks” pisándole los talones. La película que hoy nos ocupa me parece de las comedias más inteligentes que he podido ver, con grandes interpretaciones, grandes diálogos, que contribuyen a una excelente parodia de la película clásica.
Aunque Gene Wilder realiza una gran labor, está siempre ha sido el tipo de película en la que me han fascinado más los personajes secundarios que acompañan al protagonista. En particular destacaría a Marty Feldman y Cloris Leachman en los papeles de Igor y Frau Blücher respectivamente. 
Todos los momentos en los que ambos personajes aparecen son simplemente desternillantes. Feldman proporciona momentos formidables, como su joroba que cambia de lugar y cuya existencia parece ignorar, a sus meteduras de pata constantes. También me pareció genial su forma de intentar conquistar a Elizabeth, prometida del personaje de Wilder. Que decir de Frau Blücher, quien con solo mencionar su nombre aterraba a los caballos, y con su peculiar acento. Otros personajes formidables fueron los del Inspector Kemp o el de la propia Elizabeth, con momentos igualmente desternillantes.
La película no pretende otra cosa que hacer reír, triunfando sin lugar a dudas. Las frases y situaciones son cuidadas y provocan la carcajada, así como el absurdo de algunas situaciones que nunca caen en el humor barato, y mantienen lo que definiría como un tipo de elegancia. Siempre he considerado que las comedias sin pretensiones son las que mejor funcionan, pero hay que añadir que dicho género no intente provocar, algo que suele dar lugar a desastres y zafiedades. 
Este no es el caso, en una película que se ha convertido en todo un clásico como comedia.

HISTORIA (esta sección contiene detalles de la trama y el argumento)
El Doctor Frederick Frankenstein es un cirujano que se dedica a impartir clases en una escuela de medicina americana. Está prometido con una mujer de la alta sociedad, bastante snob y estirada, llamada Elizabeth. Durante sus clases, Frederick a menudo se siente frustrado cuando cualquiera de sus estudiantes le recuerda el hecho de ser nieto, el demente e infame Doctor Frankenstein. Para cortar todo lazo con él, Frederick siempre se refiere a sí mismo como el Doctor Fronkensteen, negando todo parentesco con su abuelo. Un día, Frederick descubre a través de su abogado que ha heredado el castillo y todas las pertenecías de su familia en Transilvania, tras el fallecimiento de su bisabuelo, el Barón Beauvort von Frankenstein. Frederick decide viajar a Europa con la intención de inspeccionar sus nuevas propiedades.
En la estación de tren de Transilvania, Frederick conoce a un jorobado que se presenta como su sirviente, Igor, nieto del propio sirviente de su abuelo. También conoce a una joven y encantadora muchacha llamada Inga, que servirá como su ayudante de laboratorio. Los tres llegan al castillo de los Frankenstein, donde conocen al ama de llaves, la intimidante Frau Blücher, descubriendo que cada vez que se pronuncia su nombre, los caballos relinchan desbocados y aterrorizados. Aunque el legado de su familia solo le ha proporcionado vergüenza y un sentimiento ridículo, Frederick comienza a sentirse intrigado por el trabajo de su abuelo. Una noche, siguiendo una misteriosa música de violín, Frederick descubre la entrada secreta al laboratorio de su abuelo. Tras leer los diarios privados de su abuelo, Frederick se siente cautivado por su trabajo y decide seguir adelante con el mismo, dispuesto a reanimar a un muerto. Junto a Igor, consigue robar el cadáver de un criminal que ha sido ejecutado recientemente, y Frederick decide experimentar con el cadáver de gran envergadura.
Frederick envía a Igor a obtener el cerebro de un fallecido y reverenciado historiador, llamado Hans Delbruck. Sin embargo, Igor se asusta con los rayos de una tormenta, y deja caer el cerebro destruyéndolo accidentalmente. Igor coge un cerebro marcado como anormal, y se lo entrega a Frederick sin revelar lo ocurrido. El doctor comienza el procedimiento para resucitar a la criatura, elevando el cadáver en una plataforma hasta una apertura en el techo durante una tormenta. Los rayos no tardan en golpear a la criatura, devolviéndola a la vida. Sin embargo, la criatura se aterra cuando Igor enciende una cerilla y se vuelve extremadamente violenta, intentando atacar a Frederick. El doctor, Inga e Igor se ven obligados a sedar a la criatura y atarla a la mesa. Tras esto, Igor confiesa que el cerebro que obtuvo pertenece a una persona anormal.
Mientras tanto, los habitantes del pueblo cercano al castillo comienzan a preocuparse ante la posibilidad de que Frederick continúe con el trabajo de su abuelo. 
A la reunión de los pueblerinos acude el Inspector Kemp, quien tiene solo un ojo, un brazo de madera, y un fuerte acento alemán que dificulta que sea entendido por los demás. El Inspector Kemp decide visitar a Frederick para que le asegure que no intentara crear a otro monstruo, y el doctor así lo hace. Tras regresar al laboratorio, Frederick descubre a Frau Blücher liberando a la criatura. Frau Blücher admite que fue ella quien le guio al laboratorio con la música violín, la misma música capaz de amansar a la criatura. También reconoce haber sido la amante de su abuelo. Con el violín, Frau Blücher consigue calmar al monstruo, hasta que una descarga eléctrica vuelve a asustarle provocando que escape del castillo.
Vagando por la campiña, el Monstruo se encuentra con una joven niña con la que juega, hasta lanzarla de regreso a su habitación al intentar usar un balancín con ella. También se encuentra con un ermitaño ciego, que constantemente le quema al intentar servirle sopa. Atrayendo al monstruo con la música del violín, Frederick consigue capturarle de nuevo y se encierra con él en una habitación del castillo. 
Allí, consigue calmar las ansias homicidas del Monstruo con cumplido, y finalmente reconoce su propio legado reclamando el nombre de Frankenstein. Unos días más tarde, Frederick presenta a la Criatura ante miembros importantes de la sociedad en un teatro. Frederick le muestra como un monstruo dócil, que obedece ordenes e incluso participa en un número musical con él. Sin embargo, cuando una bombilla del escenario estalla accidentalmente, el Monstruo se asusta y enfurece, provocando que los espectadores le abucheen. El Monstruo reacciona con violencia y es capturado y encadenado por la policía.
La prometida de Frederick, llega al castillo en una visita sorpresa; mientras que el Monstruo consigue escapar de su celda tras ser provocado por la policía. Esto provoca que el Inspector Kemp decida liderar un motín contra el castillo, con la intención de acabar con la amenaza del trabajo Frankenstein y el propio monstruo. Por su parte, el Monstruo acude al castillo y captura a Elizabeth, tras quedar prendado con ella. 
El Monstruo la lleva a una cueva cercana, donde ambos hacen el amor y Elizabeth se enamora de la criatura impresionada por el tamaño de su miembro. Mientras la muchedumbre busca al Monstruo, Frederick lo atrae de vuelva al castillo con la ayuda de la música de violín. Una vez en el castillo, Frederick utiliza un procedimiento para transferir parte de su intelecto a la criatura, y así calmar su agresividad.
La multitud irrumpe en el castillo e interrumpe el procedimiento, intentando llevarse a Frederick. Sin embargo, la criatura despierta mostrando un gran intelecto, y consigue razonar con los habitantes del pueblo, que deciden retirarse en paz. Elizabeth se casa con el Monstruo, convertido en un hombre sofisticado y erudito, adoptando un peinado y aspecto similar al de la Novia de Frankenstein. Por su parte, Inga se casa con Frederick, que aunque ha perdido gran parte de su intelecto, ha obtenido un miembro tan grande como el de la criatura para alegría de su nueva esposa.

ESCENA
Aunque esta en inglés es mi escena favorita con diferencia, la primera aparición de Frau Blücher.

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